Se estima que más de 800.000 personas en España sufren de hiperhidrosis o sudoración excesiva. Para detener este problema, se realizan infiltraciones de toxina botulínica en zonas como las manos, las axilas, los pies o el rostro.
Hablamos de hiperhidrosis cuando una persona produce más sudor del que necesita para regular su temperatura corporal. Para detener esta enfermedad y “bloquear” las glándulas sudoríparas, realizamos infiltraciones de toxina botulínica en las zonas afectadas.
Zonas a tratar:
- Manos
- Pies
- Axilas
- Rostro
- Cabeza
Esta enfermedad que aqueja al 3% de la población suele manifestarse en la niñez o pubertad y afecta principalmente la autoestima de quienes la padecen, pues en muchos casos, los pacientes viven avergonzados y evitan relacionarse con otras personas. Tanto hombres como mujeres, acuden a consulta desesperados porque tienen que cambiarse de ropa varias veces al día o porque no se atreven a dar la mano.
Causas posibles:
- Origen genético
- Alteraciones emocionales o estrés
- Problemas hormonales
- Trastornos relacionados con otras patologías (diabetes o tiroides)
Años atrás, los pacientes tenían que vivir con esta problemática pero ahora gracias a la toxina botulínica, más conocida como bótox, quienes la padecen pueden ponerle punto final a los síntomas de la hiperhidrosis y llevar una vida normal.
Si estás interesad@ en el tratamiento para detener la hiperhidrosis o sudoración excesiva, solicita más información haciendo clic aquí o comunícate al teléfono: 633 52 66 92.
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